Tony Clough es un reconocido artista pop trippy cuyo viaje artístico comenzó a una edad temprana cuando comenzó a experimentar con el graffiti en las calles de su ciudad natal. A medida que perfeccionó sus habilidades, comenzó a explorar diferentes estilos y medios, y finalmente descubrió su pasión por el arte pop psicodélico. El arte de Clough está fuertemente influenciado por el movimiento psicodélico de las décadas de 1960 y 1970, lo cual es evidente en los colores vibrantes, los patrones intrincados y las imágenes surrealistas que caracterizan su trabajo. Su estilo característico incorpora una mezcla de técnicas tradicionales y digitales, combinando elementos dibujados a mano con manipulación digital y diseño gráfico. La obra de arte de Clough a menudo explora temas relacionados con la conciencia, la espiritualidad y los estados mentales alterados. Se inspira en sus propias experiencias con sustancias psicodélicas, así como en las obras de artistas visionarios como Alex Gray y Robert Venosa. Su trabajo ha sido descrito como un "viaje visual" que transporta a los espectadores a reinos de otro mundo y los invita a explorar los límites de sus propias percepciones.